El jefe de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), Juan Francisco Sandoval, considera que una denuncia anónima donde se menciona a varios visitantes de Gustavo Alejos es apócrifa. El juez Lesther Castellanos, mencionado erróneamente en el informe que el Ministerio Público (MP) mandó al Congreso, expresa que más de un elemento apunta a cierta selectividad en este caso y Estuardo Castellanos, magistrado de Apelaciones, señala que más de un grupo intenta cooptar las cortes.
Roxana Orantes Córdova
El 23 de febrero, en grupos de Whatsapp y redes sociales circuló una denuncia anónima de un supuesto fiscal de la FECI quien expresa su descontento por varias irregularidades que atribuye a esa fiscalía, especialmente «lo que sucede alrededor de la elección de cortes».
El denunciante afirma que prefiere el anonimato porque «conozco de primera mano lo que me pasaría si lo hago» (revelar su identidad). Luego de esa introducción, realiza una síntesis sobre los nexos de la magistrada Gloria Porras con el ex embajador Todd Robinson, el gobierno de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) y varios operadores políticos.
Además, presenta una serie de fotografías identificadas con nombre, de varios visitantes al sanatorio donde Gustavo Alejos estuvo recluido. Como antecedente, debe recordarse el caso «Comisiones Paralelas» iniciado por la CICIG y basado en un informe que el MP mandó al Congreso (con más de una imprecisión).
Esto, porque Comisiones Paralelas tiene como base de señalamiento y criminalización las visitas o cualquier contacto: telefónico, por correo o mensaje, con Gustavo Alejos.
Sin embargo, ninguno de los que aparecen en las fotos de la denuncia anónima fue mencionado en dicho informe. A lo anterior, el jefe de la FECI dijo a Perspectiva que se trata de un informe apócrifo.
«Las imágenes podrían corresponder a las cámaras del sanatorio», dice Sandoval
Hace unos días, Gustavo Alejos habría sido acusado por evasión, y sus abogados pidieron las grabaciones del sanatorio, expresa Juan Francisco Sandoval, quien afirma que seguramente la denuncia es apócrifa y descarta que un miembro de su equipo haya realizado una acción de esa naturaleza.
Según dijo a Perspectiva:
«Las imágenes podrían corresponder a los videos de las cámaras de seguridad del sanatorio que fueron entregadas a los abogados de Gustavo Alejos en la acusación por evasión. Ellos deberán responder por el uso que le estén dando».
Consultado sobre la posibilidad de que el ex rector Estuardo Gálvez sea implicado en «Comisiones Paralelas», el fiscal dijo: «no puedo decir sobre quién ni qué más hallamos, porque ese caso está en reserva en el juzgado desde junio de 2020».
¿»Corruptos buenos» que visitan a un operador del mal?
Hasta el momento, el informe anónimo ha circulado sin hacer mucha bulla en los medios corporativos. Probablemente porque aborda un tema tabú: al parecer, también existen los «corruptos buenos» y en el bando que asegura ser puntal de la «lucha contra la corrupción y la impunidad», también existen colusiones, componendas y malos manejos que señalan a quien no cumple su agenda con absoluta obsecuencia.
Es curioso que acciones (no necesariamente delictivas), como visitar a Alejos en un sanatorio, sean prueba contundente de la calidad mafiosa del visitante, mientras otros muchos amigos y conocidos del acusado, acudieron al sanatorio y aparecen en el video, pero pasaron totalmente desapercibidos para el MP, que al enviar el informe no se habría percatado de esas fotos y videos, o sencillamente omitió mencionar a estos visitantes, entre quienes se encuentran el ya mencionado Gálvez, el ex presidente Álvaro Colom y muchos más, conocidos por su afinidad con los adalides de la «lucha contra la corrupción».
Uno de los personajes que visitó a Alejos, según las fotos que podrían corresponder a los videos del hospital, es el doctor Fernando Torres, a quien el autor del informe señala como «delegado» del rector Murphy Paiz para hablar con Alejos.
Según esta versión, luego de las instrucciones de Alejos inició «el tráfico de influencias requerido por Gloria Porras» y Torres habría sido recompensado con un vehículo propiedad de la USAC.
Asimismo, se menciona la visita de Edgar Estuardo Melchor, a quien se califica como «brazo oscuro de Thelma Aldana». El hecho es que Melchor fue subsecretario de política criminal en el MP, cuando Francisco Rivas (aspirante a la CC igual que Gálvez y Porras), era secretario general de esa institución.
Saúl Zenteno, de quien el informe destaca su militancia política izquierdista en el partido Encuentro por Guatemala, también visitó a Alejos y también aspira a ser magistrado de la CC, donde compite por ser suplente de Gálvez.
Los indicios de componenda se incrementan cuando el informe señala al jefe de la FECI de ser afín al grupo gremial que postula a Zenteno y al ex rector, pero más grave aún puede ser que la señora Jennifer Candelaria Dell’qua Lima, quien fue electa para integrar como comisionada la postuladora para magistrados de salas, lo que cerraría un círculo perverso para elegir magistrados «a la medida» del grupo Unidos por Derecho, que postula a su esposo y del que Sandoval sería afín.
Aunque el informe anónimo fuera «apócrifo» como señala el fiscal, y probablemente creado para perjudicar a los «corruptos buenos» que visitaron a Alejos en el sanatorio, es imperativo que el MP realice una investigación exhaustiva del tema, dando a conocer los nexos entre los señalados por la cámara y el «operador» Gustavo Alejos.
Un sistema que coarta la participación política de los jóvenes jueces y magistrados
«No conozco a Alejos ni sé en qué hospital estuvo», expresa el juez Lesther Castellanos, mencionado erróneamente en el informe que el MP entregó al Congreso de la República, llamado «Comisiones Paralelas».
Según narra Castellanos, hubo una solicitud de antejuicio (rechazada in limine), en su contra. En dicho informe aparece su nombre citado dos veces, por un lamentable error que fue enmendado por Juan Francisco Sandoval, «le agradezco por mandar la nota aclaratoria», comenta el juez.
Sin embargo, aunque su nombre fue sacado de ese caso, el daño a la imagen pública persiste y últimamente, con bases igualmente débiles, ha sido objeto de acusaciones infundadas que el medio de comunicación ofensor se negó a aclarar, aunque el Movimiento Cívico Nacional (MCN), citado como fuente por dicho medio, ya aclaró públicamente que ellos no habían señalado a Castellanos.
Esta situación, menciona el juez, provoca que quienes se esforzaron para lograr una carrera judicial prestigiosa y marcada por un alto estándar académico, elijan alejarse de la participación política.
Incluso, agrega Estuardo Castellanos, magistrado que preside el Instituto de Magistrados de las Salas de Apelaciones del Organismo Judicial, este tipo de acosos, ataques contra la honra y señalamientos, logran que muchos abogados eviten exponer sus ideas públicamente.
«No conozco la denuncia anónima ni sé a quienes menciona, pero en el informe oficial que el MP envió al Congreso fue clara la intención de desacreditar a muchos de los mencionados. Si ahora se descubre que llegaron otros a visitar a Alejos y estos no fueron mencionados, se evidenciaría el interés político», indica el magistrado Estuardo Castellanos, quien agrega:
«No podemos cerrar los ojos ante la realidad de que existe injerencia de parte de Helen Mack, quien tiene como operadora fiel a la juez Erica Aifán, que por este nexo mete todos sus casos en la misma causa, por ejemplo. Y este círculo se cierra, cuando se interpone una denuncia por esta ilegalidad de Aifán y recibe un amparo que le permite seguir con sus ilegalidades».
«Además de los grupos que pretenden cooptar las cortes y son señalados por los luchadores contra la corrupción, existen otros grupos que no se mencionan y están encabezados por Mack y varias ONG´s. Durante décadas han realizado un trabajo de cooptación, que incluye varias reuniones como las que señalan, pero disfrazadas de cursos, capacitaciones y otras actividades. Esta cooptación de la justicia incluye cursos y capacitaciones a la prensa, que muchas veces termina respondiendo a sus intereses. Han invertido mucho dinero y han logrado mucho poder», concluye.