Castillo Hermanos presenta un programa modelo replicable para enfrentar el flagelo de la desnutrición. “Guatemaltecos por la Nutrición: ¡un llamado a la acción!” es una iniciativa que aportará Q116 millones para combatir una problemática que afecta a miles de familias de todo el país.
Redacción Perspectiva
Castillo Hermanos siempre ha tenido un compromiso con el desarrollo integral de Guatemala y la región que se ha demostrado con acciones concretas a lo largo de sus 136 años. Una visión de desarrollo que está compuesta por varios elementos, el primero de ellos, el fomento de oportunidades económicas y generación de empleo, así como una apuesta por la sostenibilidad, la inversión social y la ética empresarial.
Esa visión está dictada por la responsabilidad social empresarial (RSE) que ha sido parte del ADN de este grupo, incluso antes de que el concepto fuera difundido y adoptado popularmente.
Bajo la filosofía “Creemos, confiamos e invertimos en Guatemala”,Castillo Hermanos, a través de su proyección social, Fundación Castillo Córdova, ha apoyado a diferentes comunidades del país con programas de nutrición tales como: el Programa de Recuperación Nutricional y el Programa de Alimentación Escolar.
En su aporte a la lucha contra la desnutrición, Castillo Hermanos, ha adquirido el conocimiento técnico necesario para hacer frente a la desnutrición y crecer en experiencia para intentar reducir esta problemática de manera acertada.
Tras varios años comprometidos con el desarrollo del país, Castillo Hermanos llegó a la conclusión de que la desnutrición, es un problema complejo y multicausal, que no se soluciona únicamente con brindar a las comunidades asistencia alimentaria. Por ello, tomó la decisión de invertir 116 millones de quetzales en una iniciativa que se ejecutarán en los próximos cinco años para abordar de forma integral la grave realidad de la desnutrición infantil en Guatemala.
Guatemaltecos por la Nutrición: ¡un llamado a la acción!
El programa busca ser un modelo replicable creado a partir de una estrategia única e integral que busca romper el ciclo de desnutrición en el país y construir, en su lugar, un círculo virtuoso de buenas prácticas de salud y nutrición.
La iniciativa inició hace un año con el análisis de estudios sobre la desnutrición en el país y, por otro lado, con acercamientos constantes con las comunidades afectadas con el objetivo de crear vínculos de confianza y respeto. También se trabajó en identificar proveedores que trabajasen el diseño y construcción de la infraestructura necesaria para hacer viable el programa.
Diseño de última tecnología y transparencia
De esa cuenta, se contrató a ARPA, una empresa española especializada en ingeniería y fabricación de equipos móviles de campaña con soluciones integrales de alimentación, logística, alojamiento, salud, agua, gestión de residuos, energía y telecomunicaciones.
Y, por último, se contrató a la Universidad Católica de América de Washington que está acompañando al proyecto mediante evaluaciones de impacto anualmente y la construcción de la línea de base de los indicadores más importantes.
La desnutrición es una terrible realidad que golpea a la niñez del país y compromete sus oportunidades a futuro, es un problema económico y social relacionado con el subdesarrollo. Por tal razón, se han definido para este programa modelo replicable los siguientes objetivos:

- Reducir en 5 puntos porcentuales y de forma sostenida la prevalencia de desnutrición crónica en las comunidades intervenidas en Huehuetenango y el de Quiché.
- Erradicar la mortalidad infantil por desnutrición aguda en las comunidades intervenidas en Huehuetenango y Quiché.
- Generar condiciones que estimulen el crecimiento económico de las comunidades y familias beneficiarias del programa.
- Estimular el cambio de conductas en el hogar que permitan la sostenibilidad de la recuperación nutricional.
- Generar evidencia técnica para definir mejores estrategias para abordar la problemática de la desnutrición.
Para alcanzar dichos objetivos, se definió un plan de trabajo que consta de cinco ejes y se ejecutará en diversos municipios de Huehuetenango y Quiché:
“Este programa que propone un modelo integral, sostenible y replicable, facilitará el aumento de la cobertura de la atención primaria de salud en las comunidades incluidas como parte del alcance geográfico del programa”, indicó José Silva, Gerente de Guatemaltecos por la Nutrición.
“Además, busca trabajar colaborativamente con las comunidades para reducir de forma sostenida la prevalencia de desnutrición y erradicar la mortalidad infantil provocada por desnutrición aguda”, agregó Silva.
Campamento de Nutrimóviles
El Campamento de Nutrimóviles consiste en una serie de infraestructuras modulares y móviles en las que se prestará atención nutricional y de salud primaria a mujeres embarazadas, mujeres en edad fértil y niños menores de cinco años.
Los campamentos contarán con equipo de última tecnología que favorecerá la rapidez en la atención. El Campamento de Nutrimóviles será la base de operaciones de este programa modelo replicable.

Además, se implementarán visitas domiciliares para monitoreo de peso y talla, así como talleres educativos. Estas acciones se ejecutarán por las brigadas de Guatemaltecos por la Nutrición, conformadas por las comunidades, de manera que, esta intervención, además, generará fuentes de empleo local y garantiza la sostenibilidad del programa al promover competencias locales y comunitarias que pueden ser replicadas.
Guatemaltecos por la Nutrición
El equipo de Guatemaltecos por la Nutrición está conformado por un médico y una nutricionista, así como un equipo de enfermeras, técnicos agrícolas, técnicos de laboratorio y técnicos en agua y saneamiento ambiental.
En conjunto, este grupo de profesionales trabajará para generar un impacto positivo y sostenible en las familias que formen parte de este programa modelo replicable.
Para más información del programa Guatemaltecos por la Nutrición visite su página web; www.guatemaltecosporlanutricion.com