Los republicanos, en control de la Cámara Baja de EE.UU., han autorizado la apertura formal de la investigación en el impeachment contra el presidente Joe Biden, tras un año de investigaciones, en donde según citan medios internacionales, no han encontrado delito que imputar al presidente, ni vínculo con los negocios de su hijo Hunter Biden.
Redacción Perspectiva
La votación, de 221 contra 212, se produjo mientras el presidente de la Cámara de Representantes Mike Johnson enfrentan una presión cada vez mayor para mostrar avances en lo que se ha convertido en una investigación centrada en los negocios de los miembros de la familia de Biden.
Antes de la votación, Johnson lo llamó «el siguiente paso necesario». Reconoció que hay «muchas personas que están frustradas porque esto no ha avanzado más rápido».
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De hecho, hace unos días, cuando se anunció la presentación de la resolución, la Casa Blanca calificó todo el proceso como una «expedición de pesca infundada» que los republicanos están impulsando «a pesar de que miembros de su propio partido han admitido que no hay pruebas que respalden la destitución del presidente Biden».
Este paso por parte de los representantes, formalizará las indagaciones que han estado realizando hasta ahora y les dará más autoridad para acometer ese trabajo.
El proceso contra Biden es visto por muchos como un esfuerzo de los conservadores para tratar de desviar la atención de los problemas legales del expresidente Donald Trump, favorito republicano para 2024.
Además, la votación garantiza que la investigación de juicio político se extienda hasta 2024, durante la campaña de Biden para la reelección, cuando probablemente se enfrente al expresidente Trump.