Elon Musk, quien previamente buscó reducir el gasto público de EE. UU. mediante despidos masivos, criticó la ley presupuestaria de Donald Trump.
Redacción Perspectiva
Trump promocionó la ley, aprobada por la Cámara y en camino al Senado, como «grande y hermosa». Musk argumentó que el plan aumentaría el déficit y el gasto, lo que «socava» su rol asesor en eficiencia y reducción de despilfarro gubernamental.
Según han dado a conocer medios especializados, el proyecto de ley prioriza la agenda de una nueva «Edad de Oro», recortando programas sociales para financiar la extensión de las rebajas fiscales de 2017.
Las publicaciones mencionan que críticos advierten que la medida perjudicará la atención médica de los estadounidenses de bajos ingresos y disparará la deuda nacional. Analistas independientes estiman un aumento del déficit de hasta 4 billones de dólares en diez años.
En una entrevista con CBS News, Musk expresó su decepción por el «inmenso» proyecto de ley de gasto, que incrementa el déficit y dificulta la labor de la comisión DOGE, creada para recortar el gasto federal.
Musk, fundador de Tesla y SpaceX, manifestó sus diferencias con Trump, quien lo designó al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) al inicio de su mandato.
«Creo que un proyecto de ley puede ser grande o hermoso», comentó Musk a CBS News, «pero dudo que pueda ser ambas cosas».
La ajustada aprobación en la Cámara representó una victoria republicana, a pesar de la oposición interna que buscaba recortes más profundos y una implementación más rápida. Ahora, enfrenta un difícil camino en el Senado.
La Casa Blanca, sin mencionar a Musk, minimizó las discrepancias sobre el gasto. Stephen Miller, asesor de Trump, señaló en X (propiedad de Musk) que no se trata de un presupuesto anual y que cualquier recorte del DOGE requeriría un proyecto de ley separado.
Los comentarios de Musk marcan una ruptura con el presidente republicano, a quien apoyó financieramente para su campaña de 2024.
En otra entrevista con The Washington Post, Musk recordó las reformas en la administración pública, que resultaron en la pérdida de empleo de muchos funcionarios, a veces sin previo aviso.
«La situación de la burocracia federal es mucho peor de lo que imaginaba», afirmó Musk, añadiendo que mejorar las cosas en Washington es una «batalla cuesta arriba».
A finales de abril, Musk anunció su retiro del gobierno para enfocarse en sus empresas. En mayo, reconoció no haber alcanzado todos sus objetivos con el DOGE, aunque se eliminaron decenas de miles de puestos de la nómina federal y varios departamentos gubernamentales se vieron reducidos o cerrados.
Musk declaró al Washington Post que continuará colaborando con el DOGE, enfocándose en mejorar los sistemas informáticos federales en lugar de nuevos despidos.
