El Manchester United vive una crisis dentro de una crisis. El club inglés, salvo momentos puntuales, no levanta cabeza desde la marcha de Alex Ferguson, pero esta temporada está tocando fondo. Tras nueve jornadas se encuentra (a falta de su partido ante el Norwich) a dos puntos del descenso y ha sumado solo 2 victorias. La dirección de los diablos rojos trabaja ya para dar un nuevo rumbo al equipo esta misma temporada.
Para ello, según el Daily Mail, los propietarios del club habrían dado luz verde al gasto de 145 millones de euros que ellos mismos se encargarían de financiar y tienen definidos los objetivos en los que se emplearía ese dinero.
Se trataría de Thomas Müller y de Kai Havertz. El United apostaría de este modo por un jugador totalmente consagrado del que se esperaría comenzara a rendir desde el primer momento y de una joven promesa (20 años) que explotó la pasada temporada en el Leverkusen y que sigue dando mucho que hablar en el conjunto alemán.
Además resolverían así una deficiencia que se arrastra del pasado verano, cuando no se produjo la llegada de ningún centrocampista para reforzar la creación de juego.
Fuente: AS
