“Cuando hablamos de alinear a la organización, significa que se deben configurar todos los activos para que estén al servicio de la estrategia y así asegurarnos que no haya confusión sobre lo que cada área debe hacer”.
Dr. Virgilio A. Cordón
Durante muchos años he acompañado a organizaciones de todo tipo al desarrollo de la planeación estratégica. Sin embargo, he encontrado que el mayor reto ha sido el poder alinear la estrategia con el diseño de la organización. El pensar desarrollar una estrategia sin considerar hacer los cambios internos necesarios para tomar el nuevo rumbo, es como esperar tener resultados diferentes haciendo lo mismo.
Según estudios del Dr. David Norton de Palladium Group: el 60% de las organizaciones no hacen sus presupuestos basados en la nueva estrategia, el 67% de Talento Humano no readecuan sus organizaciones, el 75% de los gerentes no tienen incentivos y el 95% de los colaboradores no la entienden porque no se hizo un programa de comunicación real a todo nivel. Muchas veces la implementación de la estrategia se limita a desarrollar con los colaboradores objetivos para poder cumplirla, dejando completamente de lado la reorganización necesaria que debe ser liderada e impulsada principalmente por la Gerencia General.
“Para que una organización cumpla su estrategia con éxito, debe volcar hacia a ella dos áreas. Por un lado, sus procesos, tecnologías y sistemas. Y por otro su cultura, liderazgo, capital humano y gobierno”.
A continuación, le comparto las siguientes recomendaciones básicas para la exitosa implementación de su estrategia:
Traslade su estrategia a las capacidades organizacionales necesarias para implementarlas.
Tenga claro qué es capaz y qué no es capaz su organización actual y luego desarrolle las capacidades que necesita para llevar a cabo la estrategia tanto a nivel operativo como de talento.
Divida las tareas operativas de las estratégicas. Todo el equipo (principalmente la alta gerencia) debe disponer del tiempo suficiente para el seguimiento y control de la ejecución estratégica. Si no se hace, las tareas importantes siempre serán pospuestas por las urgentes y será muy difícil avanzar estratégicamente.
Empodere a su equipo según capacidades.
Darle la responsabilidad a un colaborador sobre un tema específico sin la correspondiente autoridad para tomar decisiones, o recursos o control simplemente no funciona. Un equipo multidisciplinario cercano a la información, los presupuestos y problemas importantes, son los más capaces para tomar decisiones y ejecutar.
Rediseñe su modelo de gobernanza.
Evalúe si su sistema de gobierno actual impulsa o detiene su estrategia. Si hay algo que simplemente no contribuye de forma directa o son irrelevantes… readecue o elimínelo para comunicarlo posteriormente a todo nivel.
Desarrolle una cultura que soporte a su estrategia.
Lo que los líderes piensan, sienten y hacen impacta directamente a su estrategia. Por ejemplo: si la cultura ha sido de eficiencia y ahora pasa a la innovación para alcanzar el siguiente nivel, obviamente tiene que pasar de un enfoque de baja tolerancia al riesgo a una que permita exploración de ideas, trabajo en equipo y mayor tolerancia al riesgo.
Desarrolle una organización ágil.
Todo plan estratégico tendrá sus problemas al momento de ejecutar, por lo que tener una organización abierta al cambio y al aprendizaje continuo, le permitirá hacer frente a los desafíos y oportunidades que seguramente encontrará en el camino. Estructuras rígidas o burocráticas usualmente dificultan el avance de la ejecución estratégica.
¡Éxitos!.