Uno de los grandes dilemas de cualquier municipio que está creciendo y generando cada vez más oportunidades como el municipio de Guatemala, que crece al 7.3% anual, es cómo reducir el tráfico y generar mejores sistemas de transporte integrados en espacios que le permitan al ciudadano contar con mejores alternativas de vivienda que estén cerca de los puestos de trabajo.
Por Juan Carlos Zapata
Según el Plan de Movilidad del Área Metropolitana, en el corredor central del municipio de Guatemala se ubica el 62% de las empresas de la capital y concentra el 60% de los trabajadores, lo cual representa el 76.6% de la recaudación de la SAT correspondiente a la Ciudad de Guatemala.
El diálogo con base en datos puede ayudar a mejorar la ciudad.
Esto implica que el Gobierno de Guatemala debe incrementar la inversión en transporte público en el municipio, con mejores sistemas de transporte que fomenten la conectividad y la accesibilidad del servicio, para que sea fiable, eficiente y seguro.
Sin embargo, la densificación urbana, definida por el economista Josemari Sarasola como “el conjunto de políticas, estrategias y procesos de utilización y aprovechamiento del suelo urbano de una forma más intensiva y eficiente, concentrando actividades y ciudadanos. Los objetivos de la densificación son múltiples: por un lado, se busca limitar el desarrollo en extensión de la sociedad, reduciendo de esta forma las distancias y tiempos de movilidad, creando asimismo sinergias entre actividades y agentes económicos cercanos”.
Según el arquitecto mexicano Leonardo Díaz Borioli, “la densificación urbana es fundamental en la planeación y construcción de las ciudades, toda vez que impacta de forma directa en la calidad de vida de sus habitantes. La densificación urbana surge como solución al crecimiento desordenado de las poblaciones y consiste básicamente en un mejor aprovechamiento de los espacios potenciales de vivienda, con la finalidad de dar a las poblaciones mejor acceso a equipamiento y servicios urbanos, acorde a la cantidad de habitantes que convergen en un mismo territorio”.
Además, “lo que hace que las ciudades sean más productivas que el campo son las economías de aglomeración; es decir, la proximidad de mucha gente que producen muchos intercambios e interacciones, y es ahí donde salen las ideas y la innovación. Por otro lado, la empresa que está en una ciudad está cerca de todos los trabajadores, y entonces hay un mejor emparejamiento y la oferta y la demanda se encuentran en un solo lugar”, explica el economista Álvaro Espinoza, de Perú, explicando lo que ha pasado en ciudades como Lima, que han crecido tanto en espacio que todo se vuelve lejos.
Esto implica que para Guatemala la solución de la densificación urbana requiera un diálogo importante con el Gobierno de Guatemala, especialmente con autoridades de la Dirección General de Aeronáutica Civil, para permitir incrementar las alturas de los edificios fuera del cono de aproximación del Aeropuerto Internacional La Aurora y contar con sistemas más modernos para autorizar edificios por encima de los 30 niveles en aquellas zonas fuera de dicho cono de aproximación.
Contar con más edificios que tengan usos mixtos de suelos donde se combinen actividades productivas con vivienda hará que la necesidad de movilización hacia otras partes de la capital sea cada vez menos necesario y que se fomenten polos de desarrollo urbanos más cercanos, donde la economía de servicios pueda florecer en el municipio, a la vez que se trabaje con el Gobierno en mejorar los sistemas de transporte público. El momento de tomar decisiones acertadas es ahora.



































