¿Jordán Rodas descarriló la campaña de Thelma Cabrera o el MLP prefiere enfocarse en ganar alcaldías y diputaciones? Esta es pregunta obligada al ver cómo, luego de intentar inscribirse y no recibir credenciales, el binomio MLP-CODECA no volvió a postular candidatos. Los analistas Mario Mérida y Secil de León expresan su interpretación de este caso.
Roxana Orantes Córdova
Luego de que el Tribunal Supremo Electoral (TSE), denegara la acreditación al binomio del MLP-CODECA, ese partido inició algunas acciones de hecho que inmediatamente fueron suspendidas, como los bloqueos a carreteras.
Aunque pudieron designar a otro candidato a la vicepresidencia, el argumento fue que Jordán Rodas era el designado por las bases de dicha organización. Sabiendo que hubieran podido nominar a un relevo del ex PDH, el discurso se enfocó en que el binomio de esta organización no había sido inscrito por: 1. Racismo y discriminación contra Thelma Cabrera; 2. Temor ante la inminente victoria en las urnas de la organización, que en 2019 logró una curul en el Congreso.
Algunas opiniones señalan que MLP-CODECA eligió el camino fácil de la victimización. Para otros, se trata de una estrategia que dará mayor visibilidad al grupo, financiado por la cooperación de la autoridad vasca y otros países europeos que promueven las reformas constitucionales para crear regiones autónomas.
Secil de León y Mario Mérida exponen sus argumentos al respecto.
“Se ve venir el fraude”, afirma Secil de León
Politólogo con amplia experiencia y docente universitario, De León opina que:
“Considero que tienen derecho de participar conforme la voluntad de las bases expresada en una asamblea general para nominación de candidaturas, tomando en cuenta que Jordán Rodas es un buen candidato electoralmente hablando, además de llevar su «pan bajo el brazo» para la campaña electoral en la cual se deben invertir millones, y la voluntad de los afiliados representantes de las bases del MLP que les eligieron como binomio debe ser respetada.
Pero como en este país no se respeta la voluntad popular – ejemplos los fraudes de 2015 y 2019 – la dictadura del fraude se impone de nuevo y lo ejercen sin rubor las élites políticas, empresariales y militares con la bendición de iglesias de diversa procedencia muchas de las cuales con dudosos fines y poco aconsejables relaciones, con la participación de la llamada comunidad internacional, de los cuales algunos países hacen parte del G-13, grupo de países que cooperan con el gobierno de Guatemala. Si pudieron estas élites hacer fraude en 2015 y en 2019 y no pasó nada, ¿Por qué no podrían volver a hacerlo ya que por lo visto no hay quién se los impida ni les trae consecuencias legales? Hace rato que se ve venir el fraude que ya está en marcha».
Mario Mérida: MLP apuesta a las alcaldías y diputaciones
Según el escritor, columnista y comunicador Mario Mérida, señala:
“No había razón de peso para no inscribir al licenciado Rodas. No creo que el tema del finiquito fuera razón de peso. El tema afecta la credibilidad del TSE y pone en conflicto a un proceso que ya tenía muchos elementos de conflictividad, como los intentos de adquirir un sistema informático cuestionado”.
Sobre la posición del MLP-CODECA, que decidió no proponer otro vicepresidenciable, señala:
“La insistencia en inscribir a Jordán Rodas parece mostrar que ese partido replanteó su estrategia, apostando a lograr más alcaldías y diputaciones. Indiscutiblemente, tienen un buen número de simpatizantes. Representan las carencias y olvido permanente del campesino, lo que podría darles un buen número de alcaldías”.
Además, explica que MLP-CODECA podría estar enfocado en lograr una bancada más numerosa y representativa que la actual.
“Diez diputados serían útiles para formar una bancada y esto les permitiría trabajar en varias comisiones legislativas, además de perfilar políticamente a Thelma Cabrera, quien por el momento, no lo tendría de su lado en un debate con Edmond Mulet ni Sandra Torres, por ejemplo”.
Cabrera tiene detrás un equipo que le diseña la estrategia, probablemente empeñado en convertirla en una versión de Evo Morales en sus inicios. Entre otros elementos de su discurso, ella apela a los mismos argumentos que explotó el grupo guerrillero EGP, que contraponía a pobres y ricos, concluye Mérida.