Legisladores republicanos de la Cámara de Representantes de EE. UU. han propuesto un impuesto del 5% sobre las remesas enviadas al extranjero, como parte de un proyecto de ley respaldado por Donald Trump e integrado en un paquete legislativo más amplio sobre migración y seguridad fronteriza.
Redacción Perspectiva
Esta medida afectaría a no ciudadanos estadounidenses, incluyendo titulares de visas temporales de trabajo, residentes permanentes legales y personas en situación migratoria irregular, pero no a ciudadanos estadounidenses. Trump también anunció un memorando presidencial para prohibir el envío de remesas por personas no autorizadas a permanecer en el país.
El impuesto se aplicaría a transferencias internacionales sin importar el destino, pero aún no se han detallado los mecanismos de recaudación ni la entidad responsable.
Según el Banco Mundial, las remesas globales desde EE. UU. alcanzaron $656 mil millones en 2023, con México recibiendo $63.3 mil millones. En varios países de América Latina, las remesas representan un porcentaje significativo del PIB: Nicaragua (27%), Honduras (25%), El Salvador (23%), Guatemala (19%), Haití (18%) y Jamaica (17%).
Oklahoma implementó en 2009 un impuesto estatal sobre remesas, y propuestas similares han surgido en otros estados sin mayor éxito. El proyecto de ley S.3516 también busca imponer tarifas a las remesas para financiar la seguridad fronteriza, pero aún no ha sido debatido.
Expertos advierten que gravar o restringir las remesas podría fomentar canales informales y reducir la inversión en comunidades receptoras, incluso impulsando nuevas migraciones.
Defensores del impuesto argumentan que desincentivaría la migración no autorizada y reduciría el uso de estos fondos por organizaciones criminales, aunque no existen estudios oficiales que respalden esta última afirmación.
En comunidades dependientes de remesas, como Cajolá, Guatemala, existe preocupación por el impacto de este impuesto en la economía local y familiar. Experiencias previas muestran que la incertidumbre política en EE. UU. puede llevar a los migrantes a reducir el envío de dinero.
Con información de Infobae