Miguel Ángel Gálvez expuso ante la audiencia del amparo que presentó en la Corte de Constitucionalidad (CC), que decidirá si se le retira o no el derecho de antejuicio. El abogado querellante, Raúl Falla, explica que la Fundación Contra el Terrorismo (FCT), podría interponer otra denuncia con base en los múltiples recursos y acciones de retardo malicioso interpuestos por Gálvez, que extendieron en un año un proceso que, según la ley, debe durar máximo 60 días.
Roxana Orantes Córdova
«Ese no fue problema mío, fue problema del Juzgado de Mayor Riesgo A», dijo el juez Miguel Ángel Gálvez, trasladando implícitamente la responsabilidad a uno de sus pares.
Hace un año, la FCT denunció a Gálvez por los siguientes delitos:
Abuso de autoridad; incumplimiento de deberes; prevaricato y detenciones ilegales con causas agravantes “en forma continua”.
Aunque la ley establece que la justicia debe resolver en 60 días si procede o no el retiro de la inmunidad a los funcionarios señalados, varios recursos dilatorios interpuestos por la defensa de Gálvez lograron que el proceso se extienda durante un año, lo que para Raúl Falla ya es intolerable y según anunció, podrían interponer una nueva solicitud de antejuicio contra Gálvez, por los delitos de obstaculización a la justicia y retardo malicioso, dijo el abogado a Perspectiva.
«Perdió la oportunidad de defenderse», señala Falla
En la audiencia fue evidente que Gálvez miraba hacia abajo, lo que se interpretó como si estuviera leyendo, extremo que le fue preguntado por la magistrada Dina Ochoa, quien le recordó que si deseaba leer debía solicitar permiso para ello.
El juez negó que estuviera leyendo, aunque mantuvo la misma postura corporal de hablar fijando la vista hacia abajo, como si leyera papeles.
Según Falla, Gálvez sí leyó y esto no corresponde a lo establecido en una vista, donde se espera la espontaneidad y la exposición de argumentos sólidos.
«Llama la atención porque las vistas son para exponer y se trata de un juez con décadas de experiencia. Sin embargo, en lugar de presentar los motivos del amparo, habló de otros varios temas e intentó trasladar responsabilidades y victimizarse. Perdió una oportunidad valiosa».
«Vamos a promover nuevas denuncias»
Hace un año se presentó la denuncia contra Gálvez, comenta Falla, quien agrega que desde ese momento, el juez ha interpuesto «un cúmulo» de recusaciones, incompetencias y otros recursos que el abogado califica de «maliciosos».
«Hay litigio de mala fe, y esto desgasta al sistema pero además es un delito grave. Por ejemplo, el abogado Otto Gómez está en la cárcel por interponer múltiples recursos. Además, existen penalizaciones administrativas, que se tramitan ante el colegio profesional. Iremos ante el Tribunal de Honor y si el juez insiste en interponer recursos dilatorios, interpondremos otra denuncia solicitando el retiro de antejuicio por retardar maliciosamente el proceso de investigación en su contra», afirma Falla y concluye:
«Esperamos que si la CC no le otorga el recurso que planteó, no se una al grupo que sale por Las Chinamas para terminar tuiteando desde Washington».
