¿El ateísmo es bueno o malo? ¿Es posible conciliar el pensamiento religioso con la ciencia? ¿Qué es la espiritualidad? ¿Las religiones y las diferentes formas de creencias confrontan a la sociedad? Estas son solo algunas de las preguntas que todos nos hemos hecho alguna vez.
Para responder algunos de estos cuestionamientos, esta semana entrevistamos a Leo de Soulas, un escritor, actor y columnista cultural quien se define como ateo materialista por convicción y Brayan Moisés Alvarado, estudiante de Teología, pastor de jóvenes en la Iglesia de Dios Evangelio Completo, de tradición pentecostal.
Leo de Soulas
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¿Qué es el ateísmo?
En principio, podría decir que ateísmo es una postura de vida en relación con el tema de la existencia de dioses o seres sobrenaturales. El ateísmo desecha cualquier posibilidad de creer en la existencia de dioses y seres sobrenaturales. Esto implica descartar cualquier creencia o práctica asociada con el pensamiento mágico del religioso. No creemos ni en la existencia de dioses ni de hechos sobrenaturales. Tampoco en prácticas de adoración o veneración a estos seres. Para nosotros, las creencias religiosas entran dentro del pensamiento mágico y animista.
- ¿El ateísmo es malo o bueno?
Las cosas no son malas ni buenas per se. Por lo menos, nuestra postura no es mala para nosotros. El problema es que, al igual que la religión, es un poco difícil hablar de bondad o maldad con objetividad. Para nosotros los ateos, sin duda ha de ser una postura buena. Para mí lo es, porque me libera de resabios irracionales y me obliga a pensar con lógica. En el campo de la ética y la axiología, me permite tener una visión más amplia y actuar de acuerdo con un sistema de valores elegido por mí y no impuesto por una doctrina religiosa.
- ¿El ateísmo es científico?
No es ciencia ni puede ser científico. Tan solo es una postura de vida. Lo que sucede es que se puede valer de argumentos científicos para debatir las creencias de los religiosos, pero eso es diferente.
- ¿Cómo se convirtió en ateo?
No es que me convirtiera. En lo personal, creo que no nacemos ni ateos ni religiosos. La cultura juega un papel muy importante en la manera como veamos el mundo. Desde niño dudé de las enseñanzas religiosas.
- ¿Piensa que el ateísmo confronta a la sociedad?
A sociedades conservadoras como la guatemalteca, sin duda que la confronta. No se puede esperar otra cosa. Tampoco es que lo haga intencionalmente. La postura de un ateo pareciera espantar a una sociedad con profundos valores religiosos, pero ese problema no es del ateísmo, sino de la sociedad, porque si yo fuera religioso, no debería afectarme a mí que mi vecino crea en Bakú, por ejemplo. Ese es problema de mi vecino y no mío. Lamentablemente, los religiosos en nuestra sociedad no tienen esa madurez y apertura. Miden todo a partir de sus creencias. Por eso, insisten en apropiarse de espacios públicos y se creen con la facultad de dictar qué es lo bueno y qué es lo malo socialmente.
- ¿Quiénes son los principales teóricos del ateísmo para usted?
No me he dedicado a estudiar esa postura. Soy más bien del tipo que está convencido de su no creencia. He leído mucho sobre ateísmo, pero no sé si existirán teóricos que se dediquen al estudio de esto. Imagino que sí, pero me he dedicado más a leer de forma asistemática, aunque podría nombrar una gran cantidad de filósofos con ideas propulsoras del ateísmo, como la mayoría de pensadores empiristas, por ejemplo.
- ¿Existe espiritualidad? De ser así, ¿esto no es contrario al ateísmo?
La espiritualidad es algo que a los ateos no nos interesa mucho, por lo menos a los ateos que piensan bastante parecido a mí. Soy ateo con tendencia materialista y para mí la conciencia humana no es más que el resultado del funcionamiento del sistema nervioso.
Brayan Moisés Alvarado
- ¿Qué es la fe en Dios?
Una actitud de vida y confianza que tengo ante Dios. Esta actitud se proyecta a las personas y a toda la creación que existe.
- ¿Es mala o buena? ¿El ateísmo es malo o bueno?
Podría decir que es buena, en la medida en que procura bienestar para las personas. A través de la fe buscamos una vida digna y de equidad, así como respeto a la diversidad. Es cierto que tenemos testimonios que pueden ser todo lo contrario. Es cuando la fe o mejor dicho la religión oprime o daña, como en el caso de ciertos fundamentalismos que pueden ser una cosa terrible.
- ¿La ciencia y la fe se pueden armonizar?
Las vemos como amigas, nunca como enemigas. Una contribución nutre a la otra. Según mi escuela teológica, una no debe estar nunca por encima de la otra. Ambas se necesitan. El trabajo que desempeño abarca el área educativa. Nuestra línea es crítica acerca de la realidad. Los textos bíblicos se estudian y se analizan desde los propios aportes de diferentes ciencias: la antropología, historia, filosofía, sociología. Desde ahí nos acercamos a los textos bíblicos. Trabajamos desde una perspectiva interdisciplinaria y crítica.
- ¿Cómo se convirtió en creyente?
De niño, mi abuelita nos llevaba a la iglesia cristiana evangélica. Luego mis hermanos y yo nos separamos totalmente, pero mi conversión personal fue cuando decido regresar, mejor dicho comencé a ser parte de la iglesia. Esto fue a los diecinueve años y por una cuestión sencilla. Quería encontrar un sentido a mi vida y consideré que la fe me iba a aportar en ese sentido.
- ¿El ateísmo y las diversas religiones provocan confrontación?
Creo que la diversidad de pensamientos es una división, pero no veo que la división y la diversidad sean negativas. Me encanta que existan grupos con posiciones opuestas a la mía, y considero que la existencia de diferentes pensamientos, así como de diversas tradiciones cristianas en Guatemala nos permite tener una mentalidad más amplia, debatir y promover espacios para la discusión. Siempre que sea en el marco del respeto, la confrontación y la discrepancia son positivas. Si se trata de diferencias que puedan ponerse en el tapete para trabajar a favor de una mejor sociedad, no para pelear. Me importa que todos podamos trabajar juntos.
- ¿Qué es la espiritualidad?
En mi forma de entender y vivirla, es la fe hacia lo sagrado y en relación con todo mi entorno, involucra todas las áreas de mi vida, pero especialmente las que tienen que ver con lo sagrado y lo trascendente.
- ¿Qué es lo mágico en el pensamiento religioso?
En el contexto de este último mes, muchos sectores religiosos dicen: “oren, no se involucren, que Dios puede arreglar esta situación nacional”. Otro sector de los creyentes pensamos que una mejora en el panorama de corrupción y otras situaciones que afectan al país, no se logra solamente con ayuno y oración. Como cristianos debemos ser ciudadanos conscientes y tener una participación política. Pensar que la crisis actual puede mejorarse solamente orando y ayunando, es parte de un pensamiento mágico. Hay que colocar cada cosa en su lugar.